Hernia incarcerada y hernia estrangulada

Las hernias, al ser una protrusión de tejido a través de un orificio, pueden complicarse cuando el contenido de la hernia no puede entrar y salir libremente, esto se conoce como una hernia incarcerada.

En este caso se manifestará como una gran masa dolorosa la cual no se disminuye de tamaño con los cambios de posiciones o al tratar de devolver el contenido.

Cuando el orificio por el cual protruye la hernia es muy pequeño, la circulación hacia el contenido de la hernia puede verse afectado hasta que no le llegue sangre y este tejido poco a poco comience a morirse.

A esto se conoce como una hernia estrangulada, lo que vendría a ser como si la hernia estuviera "ahorcada". Es una condición muy peligrosa ya que si dentro de la hernia hay intestinos estos se pueden perforar produciendo un problema infeccioso severo.